jueves, 10 de mayo de 2012

Construyendo una Cultura de Paz



       Basta escuchar las noticas cada mañana para saber que el problema de la violencia intrafamiliar es un flagelo difícil de erradicar en todas partes del mundo.  Un tema que nos compete a todos y que debemos encarar como parte activa de la sociedad a la cual pertenecemos.

       Costa Rica no es ajena a esta enorme necesidad, es por ello que la Sociedad Bíblica en este país desde el año 2009, realiza  esfuerzos para prevenir la violencia bajo el proyecto “Construyendo una Cultura de Paz”.  Una verdadera opción para la prevención basada en la Palabra de Dios, la cual transforma las vidas de quienes abren su corazón a ella.

           Las  estadísticas señalaban con alarma que el 98% de los llamados al 911 eran precisamente  por situaciones de violencia intrafamiliar,  por lo que en  el 2011 se realizaron  11 talleres  alrededor del país, dirigidos  a Pastores y Líderes con el propósito de concientizar y motivar a estos  para que tomen responsabilidad en sus iglesias y comunidades como  “catalizadores de cambio” en la prevención y erradicación de la violencia donde les toca actuar.

           En una segunda etapa, se han iniciado contactos con la fuerza pública, específicamente con la plataforma que trabaja  con violencia intrafamiliar, seguridad comunitaria y la seguridad empresarial.   El propósito es llegar de manera más directa a las comunidades, de la mano de las personas que conocen a profundidad cada caso.

          En palabras de la oficial Jacqueline Fajardo coordinadora de Seguridad Comunitaria “Este proyecto será de muchísima ayuda para nosotros, es valioso contar con profesionales y  material diseñado para este trabajo en el área preventiva”.

          Todo un desafío, Sociedad Bíblica de Costa Rica, iglesias, líderes y  autoridades  públicas trabajando juntos para  poner un Stop a la Violencia.
                

La Biblia el libro que transforma vidas


Pastor Alex Alvarado, Iglesia Ciudad de Dios
           Esta es la conclusión a la que han llegado más de 1.100 personas, quienes están leyendo la Biblia capítulo por capítulo, todos los días en forma conjunta con amigos, vecinos y todos aquellos que deseen acompañarlos a vivir esa experiencia; la que ellos aseguran cambia, libera, sana y transforma sus vidas. Aseguran que los cristianos no tienen nada visible, ni tangible que los conecte con Dios, que no sea la Biblia.

           “La Biblia la puedes tocar, la puedes leer, es tuya. La Biblia es la única  revelación válida de quién es Dios, su naturaleza y qué espera Él de nosotros, fuera de eso no hay nada, así que si no leemos la Biblia estamos perdidos”, comentó el pastor Alex Alvarado, de la iglesia Ciudad de Dios.

       Persuadido de que no hay nada más que hacer que volver los ojos a la Palabra y consciente  de la condición actual de la iglesia expresa Alvarado: “lo hemos intentamos todo, eventos, conciertos lo que usted quiera, toda la riqueza que nos da la creatividad en el Señor la hemos plasmado en cada evento, sin embargo, creo que ahora solo nos queda volver a la Palabra y debo decirles que todos debemos empezar por ahí. Yo a la gente le digo hay efectos, hay resultados en la vida de las personas y vienen exclusivamente por el contacto con la Palabra, nada más se los va a dar y usted se va a perder todo eso si no tiene esa experiencia”.

        Convencido de sus expresiones y haciendo un análisis de la condición de la iglesia preparó un programa al que llamó Logos, éste está fundamentado en tres pilares: conocer, vivir y compartir. En la parte de conocer implica la lectura total de la Biblia de Génesis a Apocalipsis, en este conocer hay talleres acerca de la Biblia. Ya que según el pastor Alvarado, hay que despertar el apetito de la gente  porque la lectura de la Biblia no es algo que atrae a la multitud; no es muy popular, hay otras cosas que convocan más a la gente.

          El programa Logos está basado en Esdras7:10, esa es la inspiración central de todo, Esdras preparó su corazón para inquirir en la ley de Jehová para cumplirla y enseñarla, es un ejemplo de la Biblia para inspirar, tiempos de restauración, tiempos después de una crisis como el exilio, donde hay un ambiente sensible en la gente, así que Esdras inquirió  la ley del Señor, se propuso  investigarla, estudiarla, vivirla y enseñarla, eso motivó los tres pilares del programa Logos que es conocer, vivir y compartir.
“En mi iglesia la gente no llevaba la Biblia porque se les presentaba en la pantalla, entonces ¿qué pasaba? yo por mis carreras disfrutaba de eso, podía correr, ver más versículos sin esperar que la gente  los buscara, resultado nadie conoce su Biblia. La nueva generación no sabe ni buscar un versículo, descubrimos que no saben por dónde comenzar a buscar en la Biblia, es más ni siquiera la traían ya estaba en la pantalla entonces no la ocupaban y en la casa no la leían, esa es la realidad de la iglesia hoy”, comentó Alvarado.
Entonces le confesé a los hermanos, les dije: “yo cometí un error por mi obsesión, por darles más versículos se los proyectaba en la pantalla y los privaba de traer sus biblias y aprender a investigarla, ahora vamos a cambiar, usted va a traer su biblia yo les doy el versículo, les doy tiempo para que lo busquen y cuando ya lo hemos encontrado, con mucho gusto se los proyecto, eso va a ser un sacrificio  para mí, porque ya perdí esa paciencia , me está costando un  mundo, pero los hermanos me ayudan”, aseveró don Alex.
Además debo contarles que el sonido de las páginas corriendo en la iglesia se había perdido, cuando comencé a escuchar ese ruido de las páginas, me di cuenta de que lo extrañaba y no lo sabía, cuántos años habían pasado y no sonaba nada de eso en la iglesia, me da vergüenza decirlo. Creo firmemente que hay que darle espacio a la Palabra de Dios, porque la obra de Dios escapa a la capacidad humana, no podemos hacerlo todo, tiene que haber un avivamiento, pero por la Palabra, testificó el pastor.

         Y con una gran certeza aseguró: los efectos de la lectura de la Palabra de forma masiva no pueden ser cuantificados, porque sería una revolución interior tan tremenda que nadie sabría qué puede pasar. La Palabra de Dios contiene un poder tan grande e inimaginable; que no podemos olvidar que a Cristo se le llama el verbo de Dios, la palabra viva, entonces si entro en contacto con esa palabra algo tiene que pasar.
Aseveró Alvarado, que otra cosa que produce la lectura de la Palabra de Dios, es una fe fresca, porque necesitamos creer como nunca antes en que Dios tiene un programa, la gente está perdiendo la fe y por eso se apartan de la iglesia, por ningún otro motivo, es por eso,  pierden la fe en nosotros los pastores, en la iglesia como organización, en los predicadores, en los músicos, definitivamente pierden la fe en la gente, tenemos que recobrar la fe no hay de otra, recordemos que la fe viene por el oír y el oír de la palabra de Dios.

       Con una convicción poco común expresó el pastor: “es imposible no mencionar que he leído la biblia varias veces en mi vida y esta vez ha sido totalmente nuevo, es como si fuera la primera vez que la leo, estoy tan entusiasmado, como un niño recién convertido, estoy descubriendo cosas tan maravillosas del programa de Dios, estoy siendo quebrantado, he reído, he llorado, Dios me ha hablado tan duro que a veces me he tenido que arrepentir otra vez, me he reído del sentido del humor de Dios porque hay un sentido del humor increíble ahí, me he metido en la biblia y me ha revolucionado personalmente, estoy como nuevo, esa es mi experiencia”.

    Y continuó: posiblemente muchos crean que como ya la han leído en otras ocasiones ¿qué van a encontrar?, hoy les testifico que cuando leo la biblia me dispongo aprender de nuevo y le pido al Señor que mis años en esto no me perturben, ni me impidan aprender cosas  nuevas y eso ha sido positivo, tenemos que volver a la biblia como si fuera la primera vez que la leemos, con humildad y sencillez o no va hacer ningún efecto en nosotros.

Sociedad Bíblica de Costa Rica, Año 2012, "Año para volver a la Palabra"